Si vas al límite de tus habilidades, el cansancio o cualquier sorpresa en el camino como un bache inesperado en curva, te abrumará. Sentirás estrés y tu cuerpo reaccionará con tensión, reduciendo aún más tus habilidades temporalmente.
Si vas al límite de tus llantas en curva, cualquier desperfecto te causará una caída. Hasta si la curva se cierra más de lo anticipado, ya no podrás inclinar más y desacelerar desestabiliza el conjunto fácilmente.
Si llevas tu máquina al límite, el desgaste es mayor y la probabilidad de una falla aumenta. Además, si ya llevas el acelerador al tope, no te queda nada para salir de una situación peligrosa en desarrollo.
Si llevas tu tiempo medido para llegar, desde allí empiezas mal y aumentas el riesgo de un accidente. No recuperas tiempo en camino. Solo irás estresado, manejando más arriesgado de lo necesario. Contempla que no todos los semáforos estarán en verde, ni las carreteras vacías. ¿Contemplaste tiempo para rellenar el tanque, para comer, para un descanso? ¿Estás preparado para una ponchadura, para lluvia, neblina…?
Por esto, mi Moto Consejo #1 es: deja margen.
La única excepción es si compites o entrenas en un entorno seguro. Allí sí, prueba tus límites, igual que las de tu máquina. De hecho, es muy recomendable practicar frenadas de emergencia en un entorno seguro. Desde luego, al competir tienes que dar todo o siempre verás tus contrincantes solo de atrás.
Saludos en V
