En 2017, de repente me apareció en mis noticias de Facebook un vídeo de La Pupa, Nayarit. En el vídeo se hizo un recorrido en camioneta de protección civil a La Pupa, Nayarit en 2012. Se trata de un lugar con ruinas mineras y un pueblo con restos de una iglesia. Se explicaba que estaban investigando la posibilidad de aprovechar el lugar para el turismo. Me llamó mucho la atención, porque estaba relativamente cerca del área de Vallarta. Así que empecé a buscar información en Internet, pero casi no hay. Busqué en mapas, pero está muy difícil de encontrar. Parecía ser un lugar místico.
Busqué con quien ir a buscarlo y mi amigo Benny dijo que vamos. En aquel escogimos el 31 de Diciembre del 2017, el último día del año. Iba con mi mujer en la R1200GS y Benny en su F650GS. No sabíamos exáctamente donde está La Pupa, pero más o menos por donde buscarla. Plan de Barrancas hasta un pueblo llamado San Antonio de las Trojes. De allí se sale del pavimento a un camino de poco empedrado que luego termina en terracería bastante cruda. No hay letreros, pero donde se parte el camino se sigue a la izquierda hasta Cacalután. Son 12km de off road entre principiante y avanzado. Sube, baja y en partes hay polvo fino donde la rueda delantera se quiere ir. El paisaje es desertico, entre los cerros con paisajes increíbles. Pero ya no hay señal de celular.
Llegamos a Cacalután, un pueblo del pasado. No hay personas en el celular en las calles. Pues, no hay señal. Allí se encuentran aun niños jugando futból en la plaza. Preguntamos unos sres. y nos dijeron por donde se va a La Pupa.
El camino siguió de terracería muy cruda con piedras sueltas de tamaño entre papa y manzana. Cuando iba más y más empinado, empecé a dudar que pudiera subir de regreso con la GS y copiloto. Subió un sr. en caballo a quien preguntamos que cómo sigue el camino y si era pasable. Dijo que así seguía pero que era pasable. Bueno, el sr. estaba en un caballo y no tenía duda que no se le dificulta el camino. Nosotros estábamos en unas motos y en mi caso en una por si pesada y con socia. Luego ya no teníamos pila de celular, pero aunque tuviéramos, no había señal. Era el 31 de Diciembre y en unas horas todos estarían festejando el año nuevo. ¿Qué posibilidades había de encontrar ayuda, si fuera necesaria? ¿Protección Civil, bomberos, ambulancia? Me preocupaba la seguridad de mi mujer. Así que decidímos de abortar la misión aquel 31 de Diciembre de 2017 y nos regresábamos. Fuimos a Hostotipaquillo un rato a tomar unas chelas y luego regresar a Vallarta sanos y salvos a festejar el año nuevo.
Desde entonces me quedó la espina. Sentí que fallé, no a La Pupa, sino a mi mismo. Me dejé vencer por mis miedos. Bueno, pongo la seguridad de mi mujer ante la mía, pero aún así. No me quedé a gusto.
En Noviembre del año pasado (2019), decidí hacer otro intento. lo publiqué en Facebook para ver quien se anima ir esta vez. Tenía 3 amigos apuntados. Teníamos fecha agendada. Desafortunádamente, su servidor tuvo que regarla y fracturarse el dedo gordo de una manera sumamente estúpida. Así fue como fallé en el segundo intento sin siquiera intentarlo.
Diganme necio. Uno que otro hubiera dicho que no era mi destino conocer a La Pupa. Tal vez era por mi bien. Sin embargo, no soy quien se deja vencer tan fácil. Empecé a planearlo de nuevo. Me hubiera gustado ir en la enduro de 400cc, pero es demasiado tramo en carretera pavimentada para llegar a donde se pone interesante. Así que opté por mi KLR650. Quitando el top case es más una maxi enduro que una doble propósito. Su llanta delantera de 21" es más que apto para salir del pavimento. Bueno, la moto ya está decidida. Lancé otra publicación en Facebook para ver si aún hay otro loco que no crea en el destino y que se quiere aventar conmigo. Recibí muy pronto una llamada de mi amigo Alemán Mike, quien de hecho se había apuntado para el segundo intento. Mike es un motociclista más que experimentado cuyos viajes por todas partes del mundo sigo en su blog desde hace mucho. Si vienen a Vallarta, no pierden la oportunidad de probar su rica comida Alemana en "Hacienda Alemana". Y si Mike no anda recorriendo otro rincón del mundo es muy probable que lo conocerán, porque no conozco otro dueño de restaurante que está más al frente de su operación que él. Y si les falta hospedaje, Mike también se los renta en una habitación de lujo con privacidad en el pleno centro de la ciudad más amigable del mundo.
Mike y yo somos igual en el sentido de que vamos directo al grano. ¿La Pupa? ¿Cuando? ¿El 29? ¡Va! No se diga más.
Aparte de su R1200GS, Mike acaba de adquirir una F650GS también. Ya que le dije que iré en mi KLR650 por lo off road que se pone el camino, decidió llevar la pequeña GS. Aunque ni lo dudo que se hubiera aventado el tiro con la grande. Un día les contaré de su viaje con la grande al Barranco del Cobre. Y esta historia no tiene nada que ver con un tren cómodo y desabrido.
Ayer me llamó sólo para decirme que Frank irá con nosotros. Frank es un Gringo mexicanizado con una R1200GS ADV. Un típazo que siempre brinda apoyo sin pensarlo. Igual que Mike, Frank ha recorrido más rincones del mundo que conozco por la escuela. De hecho, ambos se han aventurado unos viajes increíbles mientras su pobre servidor tuvo que trabajar duro para financiarse su vicio de las motos. Ya, 'ta bien. No lloraré más. Es que, ¿a poco no tengo derecho a un poco de envidia?
Hoy era el día. Logré mantenerme mayormente sano, salvo un pequeño resfriado. Pero nada de huesos rotos. Así que vamos. Nos juntamos a las 8:00hrs y, aunque me van a odiar lo voy a decir. Gracias a que somos 2 Alemanes y un Gringo, los 3 estábamos a las 8 en punto donde dijimos que estaríamos. ¿Duele? ¡Aprénde a manejar tu tiempo, entonces! Chingados impuntuales me cagan. Perdón, me exalté un momento. ¿Cual me exalté? Pues, es neta. Pinches impuntuales me cagan.
De Bucerías a Compostela había sorprendentemente poco tráfico. Todos ya evitamos esta carretera si es posible por las construcciones de mejoras, los accidentes que paralizan todo y el tráfico pesado en general. Sin embargo, hoy se alinearon los planetas y tuvimos suerte. A penas los últimos km estuvimos lentos en filota, pero ya ibamos a llegar a Compostela. Compostela a Chapalilla es siempre una delicia por el estado de carretera y las curvas. Los $19 Pesos para motos valen cada centavo. En Chapalilla fuimos a la obligatoria birria. Con la panza llena seguimos por la libre hasta Ixtlán del Río donde llenamos las motos. En corto queda Plan de Barrancas y allí salimos en San Antonio de las Trojes del pavimento. Mike trató de encontrar La Pupa sin éxito en su GPS (de moto, no de celular). Optó al fin por Cacalután y seguimos el camino revirado en terracería de varios niveles de dificultad hasta llegar al mágico tramo de pavimento justo antes de llegar al pueblo unos 12km más tarde.
Iba a comprar agua cuando mis experimentados compañeros me sorprendieron con que llevában. Hasta snacks llevában. Pinche novato yo. Ya que el GPS no quiso decirnos dónde era La Pupa, recurrimos al antiguo sistema de preguntar gente. Sorpresa, había varios que no conocían a La Pupa. Al fin encontramos unos sres que nos apuntaron la dirección correcta. Curiosamente, eran los mismos sres. frente a la misma casa que había preguntado con Benny hace unos años en el primer intento. Creo que allí viven, frente a la casa y no dentro de.
Seguimos el camino y pasamos el punto donde en aquel año del 2017 decidí retornar. Si yo soy necio, Mike me gana. Seguimos y cada persona en caballo o en algún corral preguntamos. Todos mencionaban un portón de fierro detrás de una curva. Mike iba de punta, yo segundo y Frank al final. El camino estaba empinado y de mencionada terracería cruda. En un momento vi un portón de fierro del lado izq y aunque debería haber estado del lado derecho pensé que este era. El camino detrás de dicho portón estaba bastante feo con una inclinación hacia arriba muy pronunciada y todo cruzado por zanjas de muchos ángulos. Pensé en decirle a Mike, pero honestamente no quise probar este camino tampoco. Seguiamos bajando mientras yo discutía conmigo mismo si avisaría a Mike o no, cuando de repente Mike frena inesperado detrás de una curva a la izquierda. Por sorpresa frené tan brusco que casi se me fue la moto al suelo, pero logré parar pasado Mike. Volteo y veo un portón de fierro que no había visto por la curva y era del lado derecho. Mike ya dio vuelta y Frank estaba a tiempo de girar. Su servidor dio vuelta con poca gloria y a penas manteniendo la moto sobre las gomas.
Mike abrió el portón que era simplemente cerrado con una cadena enganchada en un clavo de un poste. Frank pasó, paró y se bajó a cerrar el portón detrás de nosotros. El camino iba más angosto y con hierbas altas aunque secas de los lados. Estábamos rodeados de cerros. No había posibilidad de ver las ruinas de La Pupa en alguna distancia. Solo se veían cerros y el camino angosto. Subía, bajaba y cruzaba 2 pequeños arroyos. En partes hubiera preferido la enduro 400cc. La inclinación o declinación era bastante en tramos y lo castigado del camino ni se diga. De repente pasamos una camioneta estacionada. Digo estacionada, porque no era empolvada ni con llantas desinfladas para pensar que era abandonada. Se veía demasiada limpia considerando el desertico polvo que de hecho nos cubrió ya. Lo curioso era que no había nadie cerca ni dentro de la camioneta. Tampoco había casa ni terrenos para ganado o de agricultura. Como que los 3 pensábamos lo mismo seguiamos algo pensativos y callados. Al pasar de unos kilómetros encontramos otro vehículo en iguales condiciones y hasta con una ventana abajo. No había nadie cerca ni dentro ni algo cerca que pudiera explicar el vehículo en su estado normal estacionado allí.
Después de un buen tramo y después de pasar otros 2 portones abiertos se veían las ruinas en la distancia que conocí del vídeo. Pero cuando bajábamos el camino se tapaban de la vegetación y los cerros y llegamos a una desviación. Mike decidió por la derecha. El camino era más angosto y más encerrado de hierbas altas y tierra como si lo hubieran cortado del mismo cerro. Pasamos un tercer vehículo misterioso. Había ruinas que conocí del vídeo como cuartos de los mineros de antes. Lo que menos me gustaba era que en esta direción a donde ibamos, desde más arriba había visto 2 estructuras simples, rectangulares con techos de lámina que brillaban en el sol. No sé qué se imaginan uds. Se los dejo a su imaginación, porque tampoco fuimos a averiguarlo. Estábamos en medio de la nada, sin señal de celular, sin población, sin ninguna autoridad por sabe cuantos kilómetros a la redonda. Pasábamos un portón que de hecho estaba cerrado, aunque no con candado. Había estos coches y camionetas misteriosas en medio de la misma nada. Quien me conoce sabe que no soy de los más miedosos y he enfrentado a gente no muy buena. Solo que aquí, la neta, aquí nos pudieran desaparecer en fosas con todo y motos y nadie nos encontraría ni en mil años. Ni siquiera supiera alguien por donde buscarnos. Confieso que era la primera vez en más de 20 años en este maravilloso país que no me sentí nada seguro. Tal vez era solo mi imaginación. Bueno, no solo la mía, porque Mike dijo muy serio y rápido: "Aquí no hay nada. Vamos a regresar." Ni lo terminó de decir cuando ya había dado vuelta y no pensé 2 veces para seguirlo. Pasando nuevamente una de las camionetas me daba hasta escalofríos.
Llegamos al cruce donde Mike decidió ir por la derecha y ahora optamos por el otro lado del camino. Rápido llegamos a un portón de alambre de puas cerrado con cadena y candado. Un pequeño letrero decía "propiedad privada". Detrás se veían las ruinas que conocí en el vídeo, la torre, la iglesia y otros. Antes de apagar mi moto le dí la vuelta para apuntar hacia la salida. Nos apuramos a tomar unas fotos y regar unas plantas. Estábamos rodeados de cerros y en mi mente nos estaban observando y hasta apuntando con rifles desde los alrededores. Sin embargo, no se veía nadie ni se escuchaba nada. Bueno, misión cumplida. Vamonos.
Mike prendió su moto Frank también. Al prender la mía, no se quedó prendida. Luego se apagaba. Lo hice 3 veces y al cuarto seguí acelerando un poco y mantuve la máquina prendida. Quise decirlo a Mike, pero ya había arrancado. Así que le seguí. Sentí que cada vez que dejaba de acelerar se quiso apagar, por lo menos si tenía que meter clutch. Tuve que hacer malabares entre clutch, freno y acelerador mientras seguí un camino en pésimo estado subiendo y bajando. Fue allí que me di cuenta que la relación (original) de mi KLR no era apto para seguir a las BMW que iban a un paso suave y constante. En primera la llevava forzada, pero en segunda iba tan baja en revoluciones que el motor andaba entre avanzando y apagando. Tuve que usar mucho el clutch en segunda. El problema era seguramente el carburador en conjunto con la altitud. Mientras los fuel injections de las BMW regulaban automáticamente todo, yo tendría que ajustar el ralenti. Traté de ajustarlo con el ahogador (choke) andando, pero no resultó. Tampoco quise pararme y tomarme el tiempo de ajustarlo correctamente estando en este lugar que inspiraba poca confianza. Así que pasé al lado de Mike para decirle que necesitaba más velocidad para mantener mi máquina viva. Me dijo que no hay problema que me fuera adelantando. Así lo hice y usé mi KLR como una enduro, parado en los posapies subí en tramos hasta tercera mientras bailaba con todo y moto por la terracería, polvo fino, piedras... En el portón cerrado me paré y la moto de hecho se quedó ya prendida. Abrí el portón, pasé mi moto, la apagué y esperaba para que pasaran los otros dos antes de volverlo a cerrar. Arranqué y me volví a adelantar. Esperé en otra parte con sombra a que llegaran y aproveché de tomarles fotos. Seguimos hasta Cacalután. Allí si compramos agua fría. Mi moto prendió al tercer intento y de regreso sin problema hasta Chapalilla, donde volvimos a comer otra birria antes de regresar a Vallarta.
¿Qué Moto Consejo puedo darles de esto? Aunque no sé si solo era mi (nuestra) imaginación del posible peligro, me doy con que no tuve que averiguarlo. Les recomiendo que se informan lo mejor posible de sus nuevas rutas para saber aparte de direcciones y clima la situación de seguridad del área. Tengan un plan de emergencia si van a lugares remotos sin señal de celular. ¿Qué plan tienen para un accidente o una descompostura? Y si su intuición les dice que probablemente no están seguros en un lugar, muévense. Es preferible moverse demás que de menos, porque existen situaciones donde cuando no se mueven, después ya no pueden.
Les dejo las fotos de hoy. En 2012 hubo una idea de abrir el lugar al turismo. Evidentemente no se hizo.
Saludos en V